“Vivimos obsesionados con el tiempo, pero ¿y si el tiempo no existiera?”, hablamos con José Ortiz

14 de enero de 2025
Entrevista José Ortiz
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Pablo Alonso

CEO en PMK MARKETING

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En este artículo

Bodegas Orán y Señorío de Occidente son un ejemplo perfecto de cómo tradición y modernidad pueden convivir en armonía para crear vinos únicos. Desde los viñedos bañados por el Sol extremeño hasta los caldos elaborados con variedades autóctonas y métodos sostenibles, cada botella, cuenta una historia de pasión, esfuerzo y amor por la tierra.

José Ortiz, el alma detrás de estas dos bodegas, para descubrir más sobre su visión, filosofía y su incansable búsqueda de la perfección enológica está hoy con nosotros.

¿Cómo describirías la filosofía que guía a Bodegas Orán y a Bodegas de Occidente?

Nuestro objetivo es elaborar vinos de calidad a precios competitivos. Tenemos una amplia gama de vinos: jóvenes, robles, crianzas, reservas y grandes reservas. Al fin y al cabo, queremos que sean vinos modernos, equilibrados, elegantes, siempre buscando la calidad.

¿Cómo influyen las diferencias de ambos viñedosen la personalidad de vuestros vinos?

Por ejemplo, la gama Buche, dentro de Bodegas de Occidente, son vinos que se elaboran a partir de una sola finca y tienen una característica principal y única: un microclima en un viñedo a 600 metros de altitud. Esto permite que la vendimia se retrase entre un mes y un mes y medio.

En Extremadura, que es una zona cálida, conseguimos retrasar la madurez. Las temperaturas a finales de septiembre y octubre no son las mismas que a finales de agosto o principios de septiembre, así que la uva madura lentamente.

Esto, acompañado del terroir, clima, manejo del viñedo… hace que obtengamos maduraciones largas y vinos con una acidez moderada. Son vinos secos, pero con matices golosos y dulces que los hacen muy agradables de probar.

¿Qué vinos destacarías como imprescindibles de Bodegas Orán y Señorío de Occidente?

En Bodegas Orán tenemos Entremares Semidulce, un vino atípico porque no es muy dulce. Tiene una entrada golosa, pero su final es cítrico y refrescante, ideal como aperitivo o incluso para acompañar comidas. Su característica distintiva es que no deja ese dulzor al final, sino que es fresco y tiene una pequeña aguja que lo hace muy fácil de beber. Es un vino rico y peligroso porque entra muy bien.

En tintos, destaco el Flor de Señorío de Orán, único en España por su triple elaboración: un tercio con maceración carbónica, otro tercio con fermentación tradicional, y el último tercio pasa por barrica de roble francés. Este vino ha ganado tres años consecutivos en los premios ESPIGA de la Denominación de Origen Ribera del Guadiana.

Es un vino con mucha fruta, toques especiados de la barrica como toffee y vainilla, muy agradable y versátil para aperitivos o comidas.

En Bodegas de Occidente, resalto la gama Buche: Buche y Gran Buche, que son vinos de finca con una crianza de unos ocho meses en barrica. Son más potentes que el Flor de Señorío y tienen, son de producciones cortas, elaborados con gran cuidado. Recomiendo probarlos.

¿Cómo son las diferencias de crianza entre los vinos de Bodegas Orán y Bodegas de Occidente?

En Bodegas Orán tenemos una línea más moderna. Por ejemplo, el vino Flor lleva solo roble francés. En la gama Buche combinamos roble francés y americano, variando los niveles de tostado. Los vinos de Bodegas Orán suelen llevar tostados medios o medio-plus, mientras que los de Buche presentan aromas más torrefactos y tostados más fuertes, con vinos más potentes.

Además, la gama Buche en Bodegas de Occidente trabajamos como vinos de la tierra, lo que nos da libertad para no depender de los tiempos que dicta la Denominación de Origen. Así podemos dar a cada vino el tiempo que realmente necesita.

 

Habéis elaborado vinos en Ribera del Duero, Rioja y Rueda. ¿Cómo trabajáis para respetar y potenciar las particularidades de cada terroir?

Lanzamos esa idea para responder a la demanda de distribuidores nacionales e internacionales. Decidimos elaborar un vino en cada denominación, pero manteniendo nuestras características: predomina la fruta, equilibrio, una acidez moderada, y un toque de barrica para aportar especiados. En cada región respetamos el estilo que venimos trabajando en Extremadura.

 

“Degustar, Disfrutar y Recordar” es uno de vuestros lemas. ¿Está enfocado también al enoturismo?

Sí, porque el vino suele compartirse y disfrutarse en momentos de relajación. Intentamos que quien elija uno de nuestros vinos lo disfrute plenamente, que lo comparta y que sea una experiencia que invite a la conversación. El enoturismo en Extremadura sorprende mucho a quienes nos visitan. Se dice que es la “California de Europa”, por su clima y su riqueza en productos como el cerdo ibérico y el queso, que maridan perfectamente con nuestros vinos.

¿Dónde se pueden adquirir vuestros vinos?

Vendemos exclusivamente en el canal Horeca: hoteles, restaurantes y catering, además de tiendas especializadas, vinotecas y distribuidores gourmet.

También se pueden encontrar online, tanto en esta web como en plataformas especializadas.

¿Cuál es tu visión para el futuro de ambas bodegas?

Siempre estamos innovando. Hemos plantado nuevas variedades como Larinto, una uva portuguesa con alta acidez, ideal para mezclas, y Verdejo, con dos hectáreas experimentales.

También seguimos desarrollando líneas como Señorío de Orán Selección de Barricas. Esta serie limitada de vinos de Señorío de Orán, conocida como “Einstein”, se inspira en la teoría de la relatividad y ofrece una experiencia enológica única. Esta conexión entre el tiempo, el espacio y el vino se refleja en cada botella, Einstein dice que el tiempo es relativo, que vivimos obsesionados con el tiempo, pero, ¿y si el tiempo no existiera? Por ejemplo, si estamos tomando una botella de vino, disfrutando de un sitio magnífico y bien acompañados, ese espacio de tiempo se nos acaba en un suspiro, transcurre rápidamente. Sin embargo, si estamos en una situación de estrés o ansiedad, como cuando esperamos una noticia, ese mismo tiempo se hace larguísimo. Entonces, según el momento en el que estamos, la percepción es mayor o menor, o sea, que es relativo.

Esta filosofía está plasmada en las etiquetas de la serie, que explican la historia detrás de cada vino: la fecha de la vendimia, el proceso de elaboración, el tiempo en barrica y botella. Más allá de los detalles técnicos, como he comentado, cada copa invita al consumidor a reflexionar sobre cómo el tiempo parece detenerse o acelerarse según el momento que vive.

Si tuvieras que elegir un solo vino, ¿cuál sería tu favorito?

Es muy complicado elegir, pero quizá diría el Flor de Señorío de Orán por su versatilidad. Es un vino que mejora año tras año, aunque siempre depende de factores como la añada, la lluvia y la maduración de las uvas. Sin duda, es un vino que nos da muchas alegrías y tiene un gran potencial.

 

José Ortiz, ha sido un placer conocer más sobre vuestro trabajo en Bodegas Orán y Señorío de Occidente.

Desde los viñedos que abrazan la tradición hasta los vinos que inspiran momentos inolvidables, vuestro compromiso con la excelencia es inspirador.

¡Os deseamos muchos éxitos en este viaje que, sin duda, seguirá dejando una huella imborrable en cada copa!